


Indicado para todas aquellas situaciones que requieran eutanasia.
ProcaÃna HCl 60 g.
Alcohol bencÃlico 2 ml.
Agua destilada c.s.p 100 ml.
Equinos. Los cadáveres de los animales eutanasiados con este producto deberán ser destruidos de manera que no puedan ser destinados al consumo alimentario humano o animal.
Endovenosa rápida. Con el animal en decúbito puede usarse la vÃa intracardÃaca.
Para un equino de tamaño normal, se recomienda la aplicación de todo el contenido del frasco en la forma más rápida posible, usando la aguja que contiene el estuche. En animales hiperexcitados, cuando la aplicación haya sido muy lenta, o cuando hubiere habido extravasación, puede ser necesario duplicar la dosis. En potrillos o caballos pequeños, aplicar 20 a 25 cc. por cada 100 kg. de peso vivo.
En lo posible, evitar usar el producto en animales hiperexcitados. En estos casos es aconsejable el uso de los tranquilizantes (ej: acepromacina), y una vez lograda la sedación, aplicar el eutanásico. Si el equino se encuentra de pie, el operador debe estar atento durante la aplicación de la inyección, ya que la caÃda se produce bruscamente. No abandonar al animal hasta cerciorarse de su muerte. Es importante tener cargada en jeringas la totalidad del producto a emplear, de manera de inyectar la dosis completa en el menor tiempo posible.
Dada su elevada concentración, a muy bajas temperaturas, la procaÃna puede precipitar. En ese caso, colocar el frasco a baño MarÃa. En caso de inyección accidental, los antÃdotos son: Thiopental sódico (1 g cada 100 kg de peso vivo) y Succinilcolina (1 mg/kg). Aplicar respiración artificial con óxigeno 100%.